La Inversión Extranjera Directa (IED) desempeña un papel clave en el crecimiento económico del Perú, no solo por su aporte de capital, sino también por su capacidad para dinamizar sectores estratégicos y generar encadenamientos productivos. En 2024, Perú exportó más de US $74,600 millones, y el portafolio de proyectos público-privados superó los US $70 mil millones, destacando la participación de capital extranjero en sectores como minería, infraestructura, energía y agroindustria.
El estudio “Valor Agregado de la IED en el Perú y las Cadenas de Valor”, analiza cómo estas inversiones pueden integrarse de manera más efectiva con el empresariado local, fomentando la participación en más fases de la cadena de valor global (CVG), fortaleciendo capacidades productivas y promoviendo la adopción tecnológica.
Además, el estudio identifica nuevas oportunidades en sectores emergentes como los centros de datos, la infraestructura digital y las tecnologías para la transición energética, subrayando el potencial del Perú para diversificar su matriz productiva y tecnológica.
A través de recomendaciones concretas, se propone avanzar hacia un entorno de inversión más inclusivo, sostenible y competitivo, donde las empresas locales jueguen un rol protagónico en el desarrollo económico del país.